Una de nuestras iniciativas más destacadas para promocionar la transferencia de conocimiento son las sesiones «Cercle de l’Aigua«, organizadas por la Fundación Agbar en el recinto Ágora Agbar de Cornellà. En cada una de ellas, nuestro objetivo es dinamizar el diálogo en torno a temáticas de interés y actualidad del ámbito económico, político, social, científico y medioambiental.
Por este motivo, en la última sesión del pasado jueves contamos con la presencia del profesor José Mª Gay de Liébana, quien ofreció su predicción personal del futuro inmediato en la conferencia Amenazas y oportunidades para la economía española en 2016. Gay de Liébana es uno de los economistas más renombrados de nuestro país, especialmente conocido por sus intervenciones en televisión y por su colaboración periódica en distintos medios, donde siempre hace gala de sus dotes de comunicador. En mi opinión, lo más interesante de su visión de la economía es el sentido común con que la enfoca, acompañado de un lenguaje cercano y de mucho sentido del humor para que todo el mundo la comprenda.
Su discurso económico es fruto de una amplia experiencia y se ve avalado por su larga trayectoria profesional. Es Doctor en Ciencias Económicas y Sociales y en Derecho, Perito Mercantil, Censor Jurado de Cuentas y Auditor y miembro de la Asociación Española de Asesores Fiscales. Al mismo tiempo, ha dedicado gran parte de su vida a la docencia, impartiendo clases en universidades y escuelas de negocios de primer nivel como la Universitat de Barcelona, de la que es profesor titular, ESADE o EAE. Su recorrido fue galardonado en 2013 con el Premio Economía de la Asociación de Corresponsales de Prensa Extranjera en España.
Además de todos estos méritos, me gustaría resaltar un hecho que considero de suma relevancia. Gay de Liébana fue uno de los pocos economistas que advirtió de la llegada de la crisis ya en 2007, prediciendo el problema de la deuda, cuando aún se hablaba de desaceleración transitoria. Lo hizo basándose en indicadores de la economía real y cotidiana y, como decía antes, desde la lógica del sentido común. Tal y como expresa en su libro España se escribe con E de endeudamiento, Gay de Liébana espera que la sociedad aprenda de la crisis una valiosa lección para evitar el cortoplacismo y la sobreexplotación, así como para planificar los recursos disponibles teniendo el futuro muy en cuenta.
De hecho, esta es la línea que sigue la filosofía de Agbar. Somos conscientes de la finitud de los recursos y, en consecuencia, de la necesidad de adoptar patrones de consumo y producción responsables, especialmente en lo referente a la gestión del ciclo integral del agua. En este sentido, impulsamos el modelo de economía circular, que se basa en la valorización de los residuos, es decir, en darles un nuevo uso con el objetivo final de ser autosuficientes en todos nuestros procesos. Solo desde una estrategia corporativa cimentada en los fundamentos de la economía circular es posible lograr un desarrollo empresarial sostenible en todas sus facetas: medioambiental, económica y social. Según mi punto de vista, nuestra evolución constante hacia la sostenibilidad nos legitima para seguir liderando la transformación desde el conocimiento, la tecnología y la innovación.