En el marco del I Foro Desperta, BCN! ‘Reflexiones y debates sobre el futuro de la capital catalana’, organizado por El Español, Crónica Global y Metrópoli Abierta en el recinto DFactory en la Zona Franca de Barcelona, hemos hablados sobre el compromiso empresarial con el territorio.
Nuestro compromiso con las personas en el territorio se fundamenta en la relación con todos y cada uno de nuestros stakeholders: usuarios, trabajadores, proveedores, administraciones y accionistas. Nuestro propósito es mejorar el futuro de las personas haciendo una gestión sostenible del agua. Para la cultura empresarial el propósito es básico. Así como también es fundamental la colaboración público-privada, la cooperación, la escucha activa y el diálogo para mejorar día a día.
Porque, además de dar un servicio excelente -que es el que tiene que ser-, somos muy conscientes de que hay personas que no pueden pagar el agua. Por lo tanto, ayudarles y devolverles la dignidad es por lo que la acción social está dentro de nuestra actividad habitual como concesionarios. Nuestra actividad en el territorio es poner a las personas en el centro, no solamente en nuestra gestión, sino también en la acción social.
En este diálogo, junto con Juan José López Burniol, vicepresidente de la Fundación la Caixa, he explicado nuestra acción social, estableciendo acuerdos con más de 1.200 instituciones y entidades del tercer sector en toda España. Tenemos firmados convenios de pobreza con todos los ayuntamientos del área metropolitana de Barcelona -menos con uno-. Por lo tanto, creo que la colaboración público-privada está funcionando.
Con ayuntamientos y Cruz Roja, hemos desarrollado un programa para devolver la dignidad a las personas que no pueden pagar el agua y ver cómo pueden encontrar trabajo. Es el programa OLA -ocupación, liderazgo y acompañamiento-, mediante el cual ya tenemos una red de 500 personas de las 12.000 familias en situación de vulnerabilidad para darles una formación y que puedan encontrar trabajo. Así es como somos capaces de hacer la acción social directa.
Este compromiso con todos nuestros grupos es el que genera confianza y valora la ciudadanía. En nuestro caso, no celebramos una junta general de accionistas, sino que hacemos una Junta General de Grupos de Interés como mecanismo de escucha activa y rendición de cuentas.
En relación con la sequía, es indispensable la colaboración de todos para salir de este episodio de urgencia. Este es un país con estrés de hídrico y estamos convencidos que podemos solucionar este problema que se agudiza en determinados periodos, como el actual. Pero necesitamos gobernanza. Tenemos el conocimiento, la tecnología y la capacidad de gestión para regenerar y reutilizar el agua y, de esta manera, no volvamos a padecer un episodio como este.