En la labor que desarrolla la Fundación Aquae hay un elemento transversal y una constante: la generación de valor social. Es ésta una característica común en cada una de las acciones que realizamos y que, unidas a otras como la creación de espacios de debate con clara vocación de dinamizar el intercambio de conocimiento digital, nos ha convertido en referencia internacional en torno al agua y a participar de forma activa y transparente en la construcción de un modelo económico circular, social y sostenible.
En el cuarto aniversario de la Fundación Aquae – que conmemoramos estos días- queremos reflexionar sobre los logros conseguidos, pero también sobre las metas que nos quedan por alcanzar.
Cada año hemos ido ampliando nuestros esfuerzos en acciones de fomento de la investigación, el conocimiento y el estudio del agua. Destaca en este ámbito la consolidación de la Cátedra Aquae, en colaboración con la UNED, que ha impulsado en estos cuatro años numerosas actividades de investigación, transferencia, divulgación, docencia e innovación sobre la economía del agua.
Generar espacios de encuentro y reflexión es otra de nuestras actividades prioritarias. Tenemos la convicción de que el conocimiento solo crece si se comparte y Aquae Campus es un buen ejemplo de ello. Consolidado como una cita anual clave para las personas innovadoras, emprendedoras y, sobre todo, para mentes inquietas, el próximo 20 de octubre celebramos la cuarta edición en Cartagena (Murcia). En torno al concepto «Visible-Invisible» reuniremos a los mejores expertos en neurociencia, comunicación, arte, emprendimiento social e innovación empresarial y del conocimiento.
Aquae Talent Hub también se enmarca en este eje de actuación con el que pretendemos llevar el debate sobre innovación – la «pasión de las ideas»- a diversos puntos de la geografía española como Elche, Málaga, Murcia y Santiago de Compostela.
Con el proyecto ‘Sembrando 02’, la Fundación Aquae contribuye a la reducción de las emisiones de CO2, así como a reforestar zonas que han sufrido los devastadores efectos de los incendios. Un trabajo que ha sido reconocido por el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, con los sellos de compensación y absorción de CO2, lo que nos ha convertido en la primera Fundación española que obtiene este reconocimiento.
Otro logro del que nos sentimos especialmente satisfechos es el de las alianzas – como las que promueve el objetivo 17 de los ODS- que hemos suscrito con instituciones de referencia con las que compartimos objetivos. Como por ejemplo, en el ámbito de la innovación social hemos creado la Red de Impulsores del Cambio junto a la Fundación Ashoka, un referente en el sector. Para incentivar las vocaciones científicas, hemos sellado una alianza con el CERN, uno de los centros de investigación más importantes del mundo, con el que desarrollamos actividades de formación y sensibilización dirigidas a profesores y estudiantes.
A estos logros habría que sumar otras dos alianzas de gran impacto. La primera, con Unicef en la Amazonía peruana, donde ya hemos conseguido que más de 5.000 familias, de 15 comunidades rurales, dispongan de instalaciones seguras de acceso al agua potable y el saneamiento. Seguir incrementado el número de personas y familias que se verán beneficiadas de este proyecto, nos ha llevado a ampliarlo hasta 2020. La segunda alianza a destacar, la que hemos renovado con la Fundación Once, con la que seguiremos trabajando por acabar con la discriminación que sufren las personas con discapacidad.
La cultura es parte esencial del periplo vital de cualquier persona. Por ello, desde la Fundación apoyamos distintas manifestaciones artísticas y culturales (escritura, fotografía, pintura). Especialmente satisfechos de nuestra alianza de colaboración con la Real Academia de la Lengua (RAE) o con la colección de «Clásicos Aquae».
Y ahora, en apenas unas semanas, pondremos en marcha un nuevo Consejo de Estrategia y Supervisión, no solo para implementar las pautas marcadas por nuestro Código de Buen Gobierno, que también, sino sobre todo y por encima de todo, por nuestro firme compromiso de abrir las puertas de la Fundación al mejor talento, aquel que representan las mujeres y los hombres que además de ser excelentes en su campo, no se resignan y están dispuestos a dar lo mejor de sí mismos por mejorar las condiciones sociales, económicas y medioambientales en el planeta. Profesionales de reconocido prestigio como Mariola Urrea, Profesora de Derecho Internacional Público, directora del Centro de Documentación Europea y columnista; Emma Fernández, experta en tecnología, innovación, gestión del talento y liderazgo femenino; Aziza Akhmouch, responsable de la Iniciativa de Gobernanza del Agua de la OCDE o David Calle, profesor YouTuber y uno de los 10 finalistas de la última edición del Global Teacher Prize, conocido como el «Nobel de los profesores». Todos ellos se incorporan al proyecto de la Fundación Aquae y sin duda, su aportación de valor, nos llena de satisfacción.
En definitiva, cuatro años después de comenzar esta apasionante andadura, sentimos la satisfacción de estar en el buen camino, en la dirección correcta para convertirnos en una institución de referencia en el ámbito de la ciencia, la innovación, la cultura y el cumplimiento de los ODS. Los premios y reconocimientos que hemos recibido en estos años como mejor Fundación así lo avalan.
Conseguirlo no es un objetivo fácil de cumplir, ni un camino fácil de recorrer, son muchos y complejos los retos que tendremos que afrontar en los próximos años y a los que debemos dar respuesta, pero estamos convencidos de que es el único camino si queremos que las generaciones venideras tengan un futuro más equitativo y sostenible.